Ladies from piura, Peru
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soy un chico guapo y cabello corto, a mechones sueltos, entre castaño y trigueño y cejas, sí. ¿Por qué no? Le despejaría y le pondría una nariz afilada y aguileña.
respingo en los hombres son de anime. Las narices aguileñas dan carácter.
Los ojos, entre blanco y marron, se parecerían a los de un águila y por supuestísimo serían vivos e inteligentes, expresivos y maliciosos. Eso impone mucho. Los labios: tienes a escoger. Los puedes elegir carnosos y sensuales o finos como cuchillas y preparados para la burla. En cuanto al mentón,con estas características no le van nada,barbilla ni en las comisuras de la boca.
El color de piel para el retrato de ese pelo y esos ojos es ambiguo. Escoge lo que prefieras. Y creo que con eso tienes a tu chico.
Así que re-preséntalo alto pero no mucho, ¿Vale? Si te pasas del 1,65 parecerá una vara. Hazlo flaco. A esa edad los nervios y el movimiento no dejan a uno engordar mucho. Y además, no es lo que se lleva. Los chicos gordos triunfaron en los 80 en relatos como "La Historia Interminable"
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soy un chico guapo y cabello corto, a mechones sueltos, entre castaño y trigueño y cejas, sí. ¿Por qué no? Le despejaría y le pondría una nariz afilada y aguileña.
respingo en los hombres son de anime. Las narices aguileñas dan carácter.
Los ojos, entre blanco y marron, se parecerían a los de un águila y por supuestísimo serían vivos e inteligentes, expresivos y maliciosos. Eso impone mucho. Los labios: tienes a escoger. Los puedes elegir carnosos y sensuales o finos como cuchillas y preparados para la burla. En cuanto al mentón,con estas características no le van nada,barbilla ni en las comisuras de la boca.
El color de piel para el retrato de ese pelo y esos ojos es ambiguo. Escoge lo que prefieras. Y creo que con eso tienes a tu chico.
Así que re-preséntalo alto pero no mucho, ¿Vale? Si te pasas del 1,65 parecerá una vara. Hazlo flaco. A esa edad los nervios y el movimiento no dejan a uno engordar mucho. Y además, no es lo que se lleva. Los chicos gordos triunfaron en los 80 en relatos como "La Historia Interminable"
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